Los espacios que habitamos hablan sobre nosotros. Desde la oficina de trabajo hasta la casa, así como cada uno de las habitaciones, transmiten sensaciones a quienes ingresan al lugar. En ese sentido, tanto la iluminación, como los objetos y los muebles que utilizamos de modo cotidiano, comunican algo sobre nuestra personalidad. Sin embargo, la decoración no lo es todo, también necesitas que sea funcional.